El amor llamó a mi puerta y no lo quise rechazar,
un joven de pelo moreno a mi casa quiso llamar,
ojos azules tenía y una carita angelical,
y yo bien sabía que no podía dejarle escapar,
poco a poco veía en común las cosas que teníamos,
y cada segundo que pasaba más me enamoraba de él;
y es que adoraba aquella voz, y aquella risilla nerviosa,
su rostro juvenil y su sonrisa grande y hermosa;
y todos los días solo tengo algo en mente,
y no es otro que alguien, y ese alguien es él.
¿Sabes una cosa? Pues que... TE QUIERO.